El contador de cuentos

el contador de cuentos

A: Saki (Hector Hugh Muro) I: Alba Marina Rivera E: Ediciones Ekaré, 2008 (1ªE: pertenece a la recopilación de cuentos “Animales y superanimales”, publicada en 1914)

Este álbum ya nos había llamado la atención por su formato singular, más estrecho y alargado de lo habitual, amoldándose a la ilustración que ocupa de manera completa tanto la portada como la contraportada: un vagón de tren. Pero precisamente esta ilustración, tan clásica y, en cierto modo, tristona, no nos había alimentado el impulso de llevárnoslo a casa por unos días.
¡Qué sorpresa nos hemos llevado!

Las primeras páginas parecían corroborar nuestra idea preconcebida: una aburrida tía inglesa, estirada y falta de imaginación, viaja en tren con tres sobrinos; no se sabe desde donde ni hasta donde, pero nos basta con mirarlos para ver que los críos se aburren como ostras y que la señora en cuestión es más sosa que la sota de bastos. No sabe responder a la curiosidad infinita de los requetepulcros chavales eduardianos y, pretendiendo distraerlos un poco, les cuenta un cuento tan soso como ella, en el que la única virtud de su protagonista femenina es ser una niña buena y prudente.

El único viajero que comparte el vagón con este grupillo no aguanta más tras escuchar la lamentable historia y decide contar un cuento de verdad.

En esta ocasión la protagonista también es buena, hasta ha conseguido tres medalla tintineantes por ello (la medalla a la obediencia, a la puntualidad y al buen comportamiento)

Era….horriblemente buena.
Y precisamente esas medallas serán su perdición.

Tras el final de la historia: tres chavales encantados y una sota horrorizada, no puede pintar mejor.

Os lo recomendamos fervientemente. En 1914 también había humor, nos alegramos por ellos.